La metafísica según Andrónico de Rodas un filósofo griego formado en el centro de estudios aristotélico es la rama de la filosofía que se encarga de estudiar la naturaleza, estructura, componentes y principios fundamentales de la realidad, considerando a esta como lo abstracto de lo real en la inalterable verdad en relación al ser y la dimensión externa de la experiencia, también relacionada con el infinito y lo absoluto, en oposición a la "realidad" basada en la percepción sensorial y del orden material. La metafísica entonces va más allá de lo físico o sensible, hacia el interior del orden puramente inteligible de la realidad.
El objetivo de la metafísica es cuestionar los fundamentos últimos y de todo lo existente en nuestro universo logrando una comprensión de todos los principios elementales de la vida con el fin de conocer la verdad más profunda de las cosas, y la primera pregunta fundamental para conocer esta verdad es distinguir los dos tipos de ser: el unívoco y el analógico; el primero describe al ser como la característica más general de las diferentes cosas llamadas entes o entidades y en el segundo, el "ser" es aquello que se le puede atribuir a todo, es decir, en lo que los diferentes objetos coinciden y a su vez, se distinguen.
En su obra metafísica, Aristóteles intentó definir al "ser" y abogaba por la existencia de un ser divino, al que describe como "primer motor móvil" responsable de la unidad y significación de la naturaleza; Dios en su calidad de ser perfecto, es por consiguiente el ejemplo al que aspiran todos los seres del mundo, ya que desean participar en la perfección, pero ¿qué pasa si ese Dios en su calidad de omnipotente carece de bondad o de principios concebidos por diferentes culturas en diferentes tiempos como una deidad variable, siempre sujeta a la limitada percepción humana?
En conclusión el problema con la metafísica será siempre que sus enunciados son afirmaciones acerca de las cuales nunca se podrá tener experiencia dependiendo de la percepción de la realidad de cada ser.
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